Al inicio de este año comencé a poner en práctica una técnica, de la cual había investigado; el “decluttering”. El “decluttering”, no es más que deshacerse de aquellas pertenencias que ya no usemos, queramos o necesitemos. Es eliminar aquellas cosas que no tienen uso o propósito en nuestro diario vivir. Desde que escuché hablar de este tema, supe que quería aplicarlo a mi vida. Al pasar de los años he acumulado cosas sólo porque me las han regalado, o porque les he dado un valor sentimental o simplemente porque “me da pena botarlas”. La realidad es que me di cuenta que si no me sirve para algo es mejor eliminarlo. Debo aclarar que con “eliminar” no me refiero necesariamente a tirar a la basura. Le podemos dar una segunda oportunidad a pertenencias que ya no queramos a través de donaciones, darlas como regalos, reciclarlas, venderlas, etc. Ahora bien, ¿qué beneficios podemos obtener a consecuencia del “decluttering”?
TENER MÁS ESPACIO. El cambio más notable y obvio que notarás al ir eliminando cosas, es que tu espacio será más espacioso. Esto ayuda a que haya más fluidez de movimiento, más claridad de luz, más brisa fresca. También ayuda a que se vea más elegante el espacio estética y visualmente hablando. Muchas veces no es necesario hacer una remodelación o comprar muebles nuevos; con eliminar a veces basta.
TENER MÁS TIEMPO. No cabe duda que estar organizando, recogiendo y limpiando quita bastante de nuestro tiempo. Ese tiempo se reduce significativamente cuando tenemos menos cosas que atender. Esto a su vez nos permite tener tiempo disponible para dedicar a la familia, a proyectos personales y a pasatiempos.
TENER MENOS ESTRÉS. En línea con las aseveraciones anteriores; cuando tenemos muchas tareas y responsabilidades en el hogar que cumplir, el estrés nos agobia. Incluso, encontrarse todos los días en un lugar muy poblado de cosas, nos asfixia mentalmente. Al tener menos, reducimos nuestras responsabilidades también, lo cual evita el desarrollo de estrés.
AHORRAR DINERO. Tener menos, a la larga, nos lleva a economizar. A veces, no encontramos ciertas cosas y lo que hacemos es comprar duplicados. Al tener todas las cosas visibles como consecuencia de la organización luego del “decluttering”, evitamos cometer este error lo cual nos hace ahorrar dinero. Además también se ahorra al tener menos ropa; por ejemplo, ya que se consume menos energía y agua por el uso reducido de la lavadora. Y así existen miles de formas en las cuales nuestra economía se ve salvaguardada al poseer menos. No es secreto que cada decisión que tomamos tiene un impacto económico, por lo cual pudiera hacer un post entero acerca de este tema en particular más adelante.
No soy experta en el “decluttering”; todavía me falta mucho por aprender, pero creo que era necesario que compartiera esto con ustedes para ayudarles a vivir más conscientemente. Esperen más entradas futuras acerca de este tema, conforme vaya experimentando y aprendiendo. Y tú, ¿practicas el “decluttering”?, ¿qué beneficios has encontrado?
Aprovecho la oportunidad para invitarlos a escuchar mi último podcast aquí, y a que me sigan en Facebook, Instagram y Pinterest.
Hasta la próxima,
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